EL PATALEO DEL POBRE
Hoy he ido a mi caja de ahorros, en la
cual tenia un plan ahorro. El tema venia de atrás, por lo visto
al jubilarte no se debe tener dicha cuenta, lejos de avisarme, he continuado metiendo dinero; cuando me he enterado he ido a reclamarlo y se me ha
negado, cosa que no hicieron cuando lo abrí, dicen que hay un
tiempo mínimo por lo tanto no se podía sacar hasta cumplir el
plazo, ni con penalización, total he tenido que esperar casi tres
años más.
Hoy he querido volver aquella caja y
la he encontrado convertida en un banco, estaba la misma gente, los
cuadros, los muebles y hasta la misma directora pero ahora. . . era
un banco.
Cuando me tocaba el turno, me he acercado a
la ventanilla para reclamar lo que era mio y recordarles que el
supuesto plazo había cumplido hacía una semana. La empleada me hizo
esperar unos minutos mientras desapareció entre el resto de
empleados, al rato apareció con una gran sonrisa para decirme que no
podía dármelo hasta pasado veinte y cuatro horas, insistí en que no
habían pasado veinte y cuatro sino mas de cien horas, pero todo fue
inútil, al final pedí hablar con la directora del ”banco”,
allí me tuvieron otro buen rato, vamos que hice loa mañana, para
que cuando me recibió esta me dijera lo mismo que la anterior pero
añadió que podía adelantarme algún dinero, haciéndome un favor,y abalandome en el mio, hasta el día siguiente, previo pago de treinta
euro que es lo que se cobra por un descubierto. ¿Pero que
descubierto? en tal caso ¿el descubierto seria suyo, no? ellos eran
los que tenían que ingresarlo cuando cumplió el plazo,! digo yo¡.
Al final me fui echando “sapos y
culebras” por la boca, solo para poderme desahogar un poco y no
explotar. No había podido conseguir nada y seguramente que hasta el
día siguiente no lo conseguiría pero. . . me “jodía” el
comportamiento de esta gente y me jodía tanto que el resto de la
mañana, hasta las dos de la tarde, me la pase llamándoles para
reclamarles el dinero con el pretexto de que la caja no me daba nada.
Tal vez solo nos queda el patalear,
pero. . . cuando lo hagamos, hagamoslo sonar tan fuerte. . . que
tal vez un día lo tengan que cambiar.
Posdata: Hoy he sido yo, mañana sera
él ¿ pero pasado?, pasado. . . tal vez seas tu también.
Don.
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